Tu pasado no definirá tu presente. Muchas personas que viven aferrados a su pasado. Un pasado que sigue vivo en el presente, que les sobrecarga y decepciona, que les hace sufrir continuamente. El pasado ya quedó atrás y no deberíamos recordarlo. shouldmos dejar de vivir el pasado, la verdad sea dicha.
Nuestra vida es un ciclo en el que estamos continuamente avanzando. De este modo, no podemos viajar de nuevo al pasado para cambiar las chapuzas que hemos cometido, las palabras que hemos dicho… Sin embargo, hay algo positivo y será que podemos ser mejores hoy, sin volver a recordar lo que hubiéramos preferido que no ocurriera.
Tu pasado. Un presente lleno de “Y si…”
A pesar de elegir que podemos más allá de lo que un camino en nuestra vida, podemos volver en la remota posibilidad de que vemos que no nos lleva a donde en realidad necesitamos ir, realmente lo que nunca podemos hacer es cambiar lo que proactivamente ha ocurrido . Con frecuencia contemplamos el azar de lo que podría haber ocurrido en el caso de que hubiéramos actuado de forma inesperada, suponiendo que nos hubiéramos enfrentado a un reto… Cada una de estas “incertidumbres del qué” y muchas más nos hacen plantearnos posibles salidas que nos harían no lamentar nuestro pasado en el presente.
Lo que no sabemos es que cada decisión denota nuestro presente. Si hubiéramos actuado de forma inesperada, no seríamos lo que somos ahora. Quizás esto te alivie, sin embargo, quizás tu presente no sería excesivamente tan grande como sospechas en tu mente creativa.
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Sigue avanzando, aunque cueste..
Esta es la oportunidad ideal para que sigas avanzando. Has examinado proactivamente tu pasado, has visto mal dónde has estado, qué te ha perjudicado y actualmente ha llegado el momento de seguir adelante. No puedes vivir amarrado desde hace tiempo, ¿qué ocurre entonces con tu presente?
Siente que cuanto más seas de hace tiempo, más puertas abiertas te perderás. Además, debemos prever que algo que te ha hecho mucho daño han sido individuos que has conocido y que te han hecho daño.
Suponiendo que vivas en el pasado adquirirás en duda, perderás la asombrosa oportunidad de hacer nuevas amistades y conocer magníficos individuos. En la remota posibilidad de que dejes ir el pasado y continúes caminando, recuperarás la certeza perdida y conocerás nuevos individuos que llenarán tu existencia de luz y dicha.
Empieza a renunciar al pasado, ya que aferrarse a él es prácticamente similar a guardar resentimiento contra una persona. Te impide avanzar, te impide desarrollarte, te impide alcanzar la alegría genuina.
No mereces una existencia de agudeza. El tiempo transcurre, el presente es vaporoso y es importante que le ofrezcas la consideración que merece. Gana desde antes y avanza inmóvil hacia tu futuro, mientras participas de una corriente que pasará rápidamente ante tus ojos.