Dios. Tal vez haya tenido esta sensacion perturbadora durante un momento de gran presion, enfermedad o emergencia individual. Tal vez fue el momento en que te aventuraste a salir de casa para ir a la escuela oa otra experiencia nueva. Puede que haya ocurrido cuando alguien te ha vendido o te ha defraudado de otra manera. O tal vez se deba a alguna otra experiencia que cambió todo en tu vida.
De hecho, compartimos algo a todos los efectos. De hecho, incluso las personas más inquebrantables pueden tener brotes de confianza vacilante en Dios. Estás en buena compañía, simplemente… Preliminares como ese son algo que hay que agradecer, la verdad sea dicha. Nos muestran dónde hay que reforzar nuestra confianza y no necesariamente en cristianos más asentados a largo plazo.
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Dios esta en control
Como tal, ¿cuáles son las consecuencias de su confianza? ¿Te ayuda tu confianza a ser un individuo superior? ¿Le da armonía y placer a su vida? ¿Te da confianza, fuerza y seguridad? ¿O, por el contrario, te hace sentir inquieto, responsable y avergonzado?
Son preguntas profundas, ¿verdad? Las consecuencias de su confianza son las mejores marcas de las principales áreas de fuerza de cómo son en la actualidad. En el caso de que tu confianza esté en el filo de la navaja, lo más probable es que no sea porque seas un individuo terrible que no merezca la ayuda de Dios. En general, esto es sobre la base de que usted es un individuo decente que está pasando por cosas problemáticas y horrendas.
Manten la confianza en el
Mientras luchas por mantener tu confianza, no es difícil dificultad en el “qué pasaría si…”. Imagina un escenario en el que tu confianza no es lo suficientemente capaz de verte a través de este preliminar. Considere la posibilidad de que no veas la etapa posterior en la disposición de Dios. Considere la posibilidad de que no compare la confianza de diferentes cristianos.
Sigo planteándote preguntas incómodas, ¿no es así? Suele ser difícil poner a cero el “por qué” de tu confianza cuando tu psique rebosa de “qué incertidumbres”. Así que el paso inicial es requerido en el “por qué” de su confianza. Pregúntate: “¿Por qué razón tengo confianza en Dios?”. No basta con tener confianza en Dios, sino que hay que tenerla en las cosas correctas: Esta es su duradera.